POR FRAN LORITE
De antemano te digo que no para tirar cohetes. También es verdad que aunque llevamos tres años haciendo stock, es una actividad que utilizamos para rellenar los huecos que los encargos dejan en nuestra agenda, y por suerte no son muchos (los huecos).
Producir stock nos divierte mucho porque nos permite ser creativos, experimentar nuevas ideas y técnicas, y nos lleva a lugares y a conocer a personas que de otra forma nos estaríamos perdiendo. Y además nos deja algún beneficio, aunque hoy por hoy estemos muy alejados de lo que nos gustaría. Cualquier fotógrafo de stock que haya convertido esta disciplina en su actividad económica principal te dirá que es una carrera de fondo. Hay que ser muy constante y nosotros no lo somos porque tenemos la fortuna de recibir encargos con relativa frecuencia y debemos dejar en pausa la producción de stock cada dos por tres.
Primero recapitularemos un poco para ver el progreso de nuestro portfolio y de los beneficios que han ido dejando en concepto de regalías por la venta de licencias.
Comenzamos en el stock en el año 2018 y ese año conseguimos tener en el portfolio unos 800 archivos entre fotos y vídeos. No habíamos recibido ninguna formación previa específica sobre stock y, como todo novato que empieza como nosotros, el primer reflejo que tenemos es el de subir fotos y vídeos sin ton ni son. El objetivo es tener un portfolio grande aunque sea a costa de que la calidad de las imágenes sea muy mediocre o incluso mala. Da igual, porque parece como si todo se vendiese. Existe un podcast muy recomendable llamado ‘Fotografía de stock’ (enlace AQUÍ) en el que con frecuencia recuerdan la anécdota de uno de sus colaboradores que consiste en que una de sus fotos más vendidas es una mierda de perro. Insondables son los caminos del stock, jóvenes. Uno se rebana los sesos y se deja los cuartos en producir sesiones mínimamente decentes para que luego tu top ventas mes tras mes sea…la foto de una mierda de perro. Con esta anécdota no pretendo decir otra cosa más que uno nunca sabe si algo le va a funcionar bien o mal, aunque sí que hay algunos criterios a seguir que te van a dar más confianza en que puedas conseguir ventas. Y subir las fotos de las vacaciones, como básicamente hicimos nosotros en 2018 nos dejó un portfolio abultado para ser el primer año, pero poco o nada rentable desde la perspectiva comercial: 125 dólares/euros (en adelante ‘eslotis‘). Fueron unas vacaciones cojonudas, porque Cristina y yo nos fuimos en plan nómadas a Formentera, con solo una mochila y la cámara. La historia fue muy enriquecedora a nivel personal y quizá algún día publiquemos sobre cómo recorrimos la isla a pie durmiendo en la playa. Vale, Formentera es muy chiquitita y se recorre en nada. Pero fue nuestra primera experiencia de este tipo y nos sirvió para aprender muchas cosas.
Llegamos a 2019. Empezamos el año fuerte, produciendo mucho stock ya con algo más de idea y además inauguramos nuestro canal de YouTube (enlace a nuestro primer vídeo AQUÍ), que tuvo buena acogida. Por fortuna para nosotros, pronto llegaron los encargos y por desgracia para nosotros tuvimos que parar la producción de stock.
En 2019 conseguimos aumentar nuestro portfolio en apenas 400 imágenes y pasamos de 800 a 1200 archivos. Para las cifras que conocemos de compañeros que viven del stock esto es de risa, porque 400 fotos las sube un stocker que se precie en una semana. Ese año conseguimos facturar 525 eslotis. No estuvo mal si tenemos en cuenta el incremento del portfolio, apenas un tercio más, mientras que la facturación se multiplicó por cuatro.
En este vídeo te contamos cómo nos fue en 2019
Y llegamos finalmente a 2020. El año de la pandemia. Un año que tuvimos que vivir y trabajar condicionados por unas restricciones que nos llevaron incluso a estar confinados en casa durante varios meses. Un año que altera todas las gráficas que uno pueda tener sobre su negocio. De un día para otro nos encontramos con la situación de que no podíamos producir ninguno de los encargos que teníamos en la agenda. Y no eran pocos. Algo teníamos que hacer. Vimos la posibilidad de conseguir una acreditación de prensa para salir a la calle a conseguir material de stock editorial y nos lanzamos a ello. Te lo contamos en este vídeo.
Así que durante los meses del confinamiento estuvimos produciendo bastante material editorial. Este material funcionó muy bien, sobre todo las primeras semanas, ya que a nivel de agencias de stock había una gran demanda en todo el mundo y muy poca oferta, dado que el trabajo producido por los compañeros que sí que salían a fotografiar lo que pasaba en la calle pero que trabajan para medios de comunicación no quedaba a disposición de las agencias de stock. Por tanto, nuestro portfolio subió, y nuestras ventas también.
Después llegó el desconfinamiento y pudimos continuar con los encargos, lo que produjo que nuevamente detuviésemos la producción de stock, en incluso desactivamos el canal de YouTube porque no teníamos tiempo de producir material nuevo, ni tan siquiera para contestar todos los comentarios y preguntas que nos hacíais, y no queríamos que quedase como un canal zombie, así que decidimos desactivarlo y ya pensaríamos si volvíamos con el tema de YouTube. Aun así, aumentamos el portfolio en 800 nuevos archivos de foto y vídeo, el doble que en 2019.
Si hacemos una regla de tres y pensamos en los datos de 2019, en el que con 1200 fotos facturamos 525 eslotis, era de esperar que con 2000 fotos estuviésemos alrededor de los 875 eslotis. Nuestra sorpresa ha sido grata al comprobar que hemos superado esta expectativa, ya que nos hemos ido hasta los 1317 eslotis, lo que significa que hemos aumentado el rendimiento de nuestro portfolio no solo cuantitativamente sino también cualitativamente, y que cada foto subida nos da ahora un mayor rendimiento económico.
Estamos hablando de cifras ínfimas si tenemos en cuenta a dónde queremos llegar, pero son cifras en claro ascenso. Y sí, la cantidad cobrada en relación al trabajo realizado es de risa. Pero como todo en esta vida, esto es según se mire. Hemos obtenido un salario de un mes de una persona normal, o un complemento de algo más de 100 eslotis al mes, y es un ingreso más o menos consolidado que solo puede crecer, siempre y cuando sigamos alimentando el portfolio.
Así que estamos más que contentos. Tan contentos estamos que hemos decidido reabrir el canal de YouTube e incluso hemos creado nuestro podcast.
¿Eres fotógrafo de stock? ¿Cómo te rinde el porfolio? ¿Te gusta que hablemos de stock en el blog? Déjanos tu comentario.
Os dejamos también el enlace al vídeo en el que hablamos de esto mismo y también el podcast por si prefieres escucharlo.
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